miércoles, 29 de junio de 2005
Corre Lola corre.
Yo no lo sé de cierto.
Yo no lo sé de cierto,
pero supongo que una mujer y un hombre
algún día se quieren, se van quedando solos poco a poco,
algo en su corazón les dice que están solos,
solos sobre la tierra se penetran,
se van matando el uno al otro.
Todo se hace en silencio.
Como se hace la luz dentro del ojo.
El amor une cuerpos.
En silencio se van llenando el uno al otro.
Cualquier día despiertan, sobre brazos;
piensan entonces que lo saben todo.
Se ven desnudos y lo saben todo.
(Yo no lo sé de cierto. Lo supongo)
poema de Jaime Sabines.-
foto de Jordi Espel, Cabo Verde.-
domingo, 26 de junio de 2005
Mujeres voladoras.
Capítulo I.
No se me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; pero eso sí ¡y en esto soy irreductible! no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!
Esta fue - y no otra- la razón de que me enamorase, tan locamente, de María Luisa.
¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos? ¿Qué me importaban sus extremidades de palmípedo y sus miradas de pronóstico reservado?
María Luisa era una verdadera pluma!
Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina, volaba del comedor a la despensa. Volando se preparaba el baño, la camisa. Volando realizaba las compras, sus quehaceres...
¡Con qué impaciencia esperaba que volviese, volando, de algún paseo por los alrededores! Allí¡ lejos, perdido entre las nubes, un puntito rosado!
"María Luisa! María Luisa!"... y a los pocos segundos, ya me abrazaba con sus piernas de pluma, para llevarme, volando, a cualquier parte.
Durante kilómetros de silencio planeábamos una caricia que nos aproximaba al paraíso; durante horas enteras nos anidábamos en una nube, como dos ángeles, y de repente, en tirabuzón, en hoja muerta, el aterrizaje forzoso de un espasmo.
¡Que delicia la de tener una mujer tan ligera..., aunque nos haga ver, de vez en cuando, las estrellas! ¡ Que voluptuosidad la de pasarse los días entre las nubes... la de pasarse las noches de un solo vuelo!
Después de conocer una mujer etérea, ¿ puede brindarnos alguna clase de atractivos una mujer terrestre? ¿Verdad que no hay diferencia sustancial entre vivir con una vaca que con una mujer que tenga las
nalgas a setenta y ocho centímetros del suelo?
Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender la seducción de una mujer pedreste , y por más empeño que ponga en concebirlo, no me es posible ni tan siquiera imaginar que pueda hacerse el amor más que volando.
Oliverio Girondo.-
Texto de "Espantapájaros (al alcance de todos)"
La foto se llama "Acquade" y es de Philippe Halsman.-
La puta oriental.
Vuelo sin orillas.
Vuelo sin orillas.
Abandone las sombras,
las espesas paredes,
los ruidos familiares,
la amistad de los libros,
el tabaco,
las plumas,
los secos cielorrasos;
para salir volando,
desesperadamente.
Abajo: en la penumbra,
las amargas cornisas,
las calles desoladas,
los faroles sonámbulos,
las muertas chimeneas,
los rumores cansados;
pero seguí volando,
desesperadamente.
Ya todo era silencio,
simuladas catástrofes,
grandes charcos de sombra,
aguaceros, relámpagos,
vagabundos islotes
de inestables riberas;
pero seguí volando,
desesperadamente...
Un resplandor desnudo,
una luz calcinantese interpuso en mi ruta,
me fascino de muerte,
pero logre evadirmede su letal influjo,
para seguir volando,desesperadamente.
Todavía el destino
de mundos fenecidos,
desoriento mi vuelo-de sideral constancia-con sus vanas parábolas
y sus aureolas falsas;
pero seguí volando,desesperadamente.
Me oprimía lo fluido,
la limpidez maciza,
el vacío escarchado,
la inaudible distancia,
la oquedad insonora,
el reposo asfixiante;
pero seguía volando,
desesperadamente.
Ya no existía nada,
la nada estaba ausente;
ni oscuridad, ni lumbre,
-ni unas manos celestes-ni vida,
ni destino,ni misterio, ni muerte;
pero seguía volando,
desesperadamente.
Oliverio Girondo.-
Foto de Trent Parke, fotógrafo australiano.-
Todo es tan poco.
UNA CARTA DE AMOR.
Todo lo que de vos quisiera
es tan poco en el fondo
porque en el fondo es todo
como un perro que pasa,
una colina, esas cosas de nada, cotidianas,
espiga y cabellera y dos terrones,
el olor de tu cuerpo,
lo que decís de cualquier cosa,
conmigo o contra mía,
todo eso que es tan poco
yo lo quiero de vos porque te quiero.
Que mires más allá de mí,
que me ames con violenta prescindencia
del mañana, que el grito
de tu entrega se estelle
en la cara de un jefe de oficina,
y que el placer que juntos inventamos
sea otro signo de la libertad.
Julio Cortázar.-
foto de Sergio Larrain.-
domingo, 12 de junio de 2005
All that jazz!
LOS LOCOS.
Octavio Paz.
La arquitectura es el testigo menos sobornable de la historia.
La indiferencia del mexicano ante la muerte se nutre de su indiferencia
ante la vida.
Sin democracia la libertad es una quimera.
Creo que tengo el colesterol alto.
Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido
inyectado el veneno del miedo.... del miedo al cambio.
Tendría que cambiar de champú.
Un mundo nace cuando dos se besan.
En verano me molestan los mosquitos.
Octavio Paz 1914-1998. Escritor mexicano.-
foto de Inge Morath.-
jueves, 9 de junio de 2005
Besos en el tablero.
Ajedrez.
Porque éramos amigos y, a ratos, nos amábamos;
quizá para añadir otro interés
a los muchos que ya nos obligaban
decidimos jugar juegos de inteligencia.
Pusimos un tablero enfrente de nosotros:
equitativo en piezas, en valores,
en posibilidad de movimientos.
Aprendimos las reglas, les juramos respeto
y empezó la partida.
Henos aquí hace un siglo, sentados, meditando
encarnizadamente
cómo dar el zarpazo último que aniquile
de modo inapelable y, para siempre, al otro.
rosariO castellanos.-
foto de Henri Cartier Bresson.-
lunes, 6 de junio de 2005
Laberinto.
No habrá nunca una puerta.
Estás dentro y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
de interminable piedra entretejida.
No existe. Nada esperes.
No existe. Nada esperes.
Ni siquiera en el negro crepúsculo la fiera.
Jorge Luis Borges.-
dibujo Mc Escher.-
sábado, 4 de junio de 2005
viernes, 3 de junio de 2005
pagina prevert
http://marcelosaraceno.tripod.com/poemasprevert.html
no me tengo que olvidar de bajar algunos poemas que me gustan mucho.
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
no me tengo que olvidar de bajar algunos poemas que me gustan mucho.
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
jueves, 2 de junio de 2005
Elementos de la Nostalgia.
Tiempo de Ser.
Pasa eso de tener sed y estar sin lengua.
Sucede también que el puño se nos cansa,
que el ojo no responde,
que la boca se niega y se separa del rostro.
Estamos para morder la verdad
y quitarnos de a poco la sorpresa,
para ponernos a horcajadas en un grito.
Para ser.
Algún día sabremos por qué.
Mientras tanto
somos apenas como un zapato nuevo
que nos juzga los pies.
Nira Etchenique, de Mi canto caído.-
foto de Robert Doisneau.-
miércoles, 1 de junio de 2005
Palabras que sanan.
Esperando que un mundo sea desenterrado por el lenguaje, alguien canta el lugar en que se forma el silencio. Luego comprobará que no porque se muestre furioso existe el mar, ni tampoco el mundo. Por eso cada palabra dice lo que dice y además más y otra cosa.
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